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Este post está orientado sobre todo para aquellos profesores que están pensando en estudiar para obtener el Certificado de Enseñanza de Inglés para Hablantes de Otros Idiomas, también conocido como CELTA. Es cierto que mientras estás estudiando para obtenerlo, los días se te hacen eternos y te pasas noches sin dormir, y es ahí cuando te preguntas si vale la pena o no obtenerlo a pesar de todos los problemas. Bien, este post es para ti. Aquí encontrarás cinco consejos que necesitas saber:
1. DINERO
Piensa cuidadosamente cuál es la mejor época del año para hacer el CELTA. Yo tuve la suerte de estar trabajando en un puesto en el que tenía vacaciones de verano pagadas, por lo que pude sacármelo en ese periodo y no me tuve que preocupar por el dinero (¡tan solo de lo que estaba estudiando!). Si estás en otra situación, asegúrate de tener suficiente dinero para poder mantenerte sin trabajar durante un mes. ¡Los triple cafés no se compran solos…!
2. DESPLAZAMIENTO
El transporte es algo primordial. Yo elegí estudiar en la Iternational House, en Dublín. Al principio me preocupaba un poco el cómo llegar, ya que a veces los autobuses pueden llegar tarde o no llegar, pero tengo que decir que los autobuses de Dublín son fantásticos y siempre llegaban a tiempo. Sin embargo, siempre tienes que estar preparado para cualquier imprevisto. El tráfico de Dublín a hora punta es una pesadilla, si las conexiones entre autobuses no son tu mejor opción, entonces te sugiero lidiar con otras personas que vayan al mismo destino en coche. Un consejo, familiarízate con tu ruta desde dónde estés alojado hasta el centro dónde vayas a realizar el CELTA. Hay varias opciones para alojarte en el centro de Dublín, Cork y Galway dependiendo de dónde estés planeando realizar el curso. Por lo que solo tendrás que levantarte a la hora e ir a clase (¡después de haber programado como un millón de alarmas, para despertarte, por supuesto!)
3. ORGANIZACIÓN
Siempre he sido un poco friki con el tema de los separadores, post-it y todo lo que una papelería pueda vender, en definitiva, soy esa típica persona que su libro está lleno de colores dividendo lo importante de lo menos importante. El color del subrayado siempre coincidía con el post-it, eso me ayudaba bastante a la hora de organizarme. El primer día de curso, la escuela proporciona a cada estudiante un archivo el cual contiene todos los temas que se van a dar junto con las fechas ya programadas. Este archivo se convirtió en algo sagrado para mí, y también debería de serlo para ti. Aunque estaba estresada por la cantidad de trabajo que tenía, esto me ayudó bastante para saber qué temario íbamos a hacer y cuándo, así poder dividir mí tiempo y ser más eficiente.
4. RELAJARSE
Ignora todas aquellas historias que se dicen sobre el horror y las enormes cargas de trabajo que puedes llegar a tener mientras estás cursando el CELTA. Pienso que es una enorme experiencia que, si tienes la oportunidad, tienes que vivirla, siempre y cuando te organices correctamente. Sí que había días malos, no os lo voy a negar, pero eran pocos y no eran seguidos. Llegaba por la noche a casa, me hacía la cena y dedicaba unas 2 o 3 horas a mis tareas, e incluso me podía permitir ver la televisión durante una hora antes de ir a la cama. Además piensa que también tienes el fin de semana entero para descansar y ponerte al día. ¡se puede!
5. COMPARACIÓN
Por último, pero no por ello menos importante: por favor, no te compares con nadie de tu curso. ¿Qué pasa si nunca has enseñado antes y no tienes muy claro cuál sería el futuro perfecto? Te puedo garantizar que estas cosas, no son ni la mitad de importantes que piensas cuando empiezas el curso CELTA, tienes, simplemente, que tener una mente abierta, estar entusiasmado y lleno de energía. Algunos de los aprendices más exitosos que estuvieron en mi curso nunca antes habían estado delante de una clase antes de empezar el CELTA y a día de hoy aún están enseñado, y viajando alrededor del mundo desde hace 2 años. ¿Mi consejo? ¡Deshazte de esos libros de gramática, bebe mucho café y disfruta de tu camino!