Correr de un lado para otro, echar currículums, hacer llamadas para ver pisos, responder mensajes de familiares, entregar documentos en bancos y oficinas… Los primeros días en Reino Unido suelen ser una interminable lista de gestiones que llevar a cabo antes de poder respirar tranquilos. Entre ellos, registrarse para ir al médico en Reino Unido.
Apuntarse al GP (General Practitioner, el equivalente al médico de cabecera español) es uno de las más esenciales. Aunque conseguir alojamiento, trabajo y una cuenta de banco puedan parecer objetivos más urgentes, no debemos dejar nuestra asistencia sanitaria para el momento en que caemos enfermos. Es algo muy sencillo de hacer y nos puede ahorrar muchos problemas en el futuro.
Así que si todavía no lo has hecho, sigue leyendo para obtener toda la información necesaria, ¡y a correr a tu GP!
¿Dónde acudir?
Lo primero es localizar tu centro médico más cercano. Para ello, el sistema nacional de salud británico, el NHS (National Health Service) tiene buscadores oficiales divididos por países: Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda del Norte.
Registrarse
Aunque recomendamos apuntarse al GP que esté más próximo a tu casa, no es obligatorio. Puedes intentar registrarte en otro que tenga mejores horarios de atención, personal que hable en tu idioma u otros servicios que te interesen más. Toda esta información la podrás encontrar en las páginas webs suministradas arriba.
Después, te tocará contactar con el centro médico para ver si resides en su área de influencia (que esté cerca de tu domicilio no siempre te garantiza esto, lamentablemente) y si aceptan pacientes. En caso negativo, habrás de intentarlo con otro GP. En caso afirmativo, podrás concretar cuándo acudir de forma presencial para rellenar un formulario de registro. Algunos GPs dan cita para ello mientras que otros tienen un horario abierto.
En el registro, tendrás que probar con documentación que tienes derecho a recibir sanidad gratuita en Reino Unido. Normalmente, se te requerirá:
- Una prueba de identidad (Pasaporte, carnet de conducir británico, tarjeta médica del NHS)
- Una prueba de residencia (cartas del banco, facturas a tu nombre…)
También, como hemos dicho antes, tendrás que completar un formulario. En él, te pedirán la siguiente información:
- Datos personales (nombre y apellidos, fecha de nacimiento, dirección)
- Datos de contacto (correo electrónico y números de teléfono)
- Confirmar si has estado apuntado a otro GP antes (para transferir tu historial al nuevo).
Además, deberás rellenar un segundo documento donde te hacen preguntas generales sobre tu salud, para tener la máxima información posible sobre el paciente en la primera consulta.
Una vez completado el trámite se te dará de alta en el sistema. Sin embargo, algunos centros sanitarios pueden comunicarte que hay una lista de espera y que tardarás unos días en ser un paciente oficial.
Pedir cita
En España, la mayoría de centros de salud disponen de un servicio de citas online, lo que agiliza enormemente la gestión. Lamentablemente, en Reino Unido todavía no se han instaurado este tipo de medidas y los pacientes tienen que pedir cita bien por teléfono o de forma presencial.
Algunos GP también permiten visitas sin cita previa, para lo que normalmente tienen establecido un horario ( que suele ser únicamente por la mañana). Así, si en alguna ocasión te encuentras mal y necesitas acudir al médico el mismo día, puedes hacerlo.
Como has podido ver, registrarse en el sistema sanitario británico es un proceso rápido y fácil, que no requiere apenas papeleo. ¿A qué esperas para realizarlo?