Si estás preguntándote para qué salir de tu zona de confort puede que sea porque ya tienes media pierna fuera y estás pensando en vivir tu experiencia en el extranjero. O, al menos, la idea. Pero necesitas el último empujón. Así que, para que dejes atrás las dudas, voy a facilitarte algunas respuestas.
El mundo no acaba donde acaba tu segura burbuja
Primero de todo, necesitas descubrir que el mundo no acaba donde acaba tu burbuja. Que hay vida más allá de ella y la gente bonita campa a sus anchas aportándote grandes aprendizajes y experiencias. Obviamente no todo es gente bonita, pero estos segundos, por desgracia o por suerte, también te aportarán aprendizajes y experiencias.
Con esto te estoy diciendo que si no te mueves las cosas no llegarán a ti, así que lo mejor es moverse y salir de ella en búsqueda de grandes vivencias que van a cambiarte la vida. No temas, te va a encantar salir.
Para aprender a vivir
Y con esto me refiero a aprender a disfrutar las cosas simples, a disfrutar el presente y hacer de cada segundo un momento único e histórico en tu existencia. Aprenderás a aceptar el fluir de las cosas y romperás con los esquemas fijos y cuadrados que no toleran las diferencias y que llevan años instalados en tu cabeza.
Necesitas salir, para abrir la mente y empezar a crecer/amar/vivir en otros países, en otros idiomas y con otras personas. Para ver la realidad desde otras perspectivas, desde otros ángulos. Y así, poder verte mejor.
Y viéndote mejor, no te asustes, vas a descubrir tus miedos y lograr ser más fuerte que ellos. Puede que descubras que temes estar sola. No temas, cuando salgas de tu zona de confort vas a descubrir que la soledad no es una enemiga, sino una gran aliada. Y, en ella, conocerte.
Para conocerte
Sí, necesitas salir para conocerte. Para saber quién eres en realidad. Para saber ubicar tus fronteras mentales, tus defectos y virtudes. Para cuestionar tus valores, para aceptarte las deficiencias, para curarte las heridas, para darte el oxígeno que permite respirar. Para reconocerte y dar un paso más adelante.
Para vivir tus sueños
Para alcanzar tus sueños. Para vivirlos de verdad y dejar de soñarlos. Para dejar atrás las listas de “cosas que quieres hacer y que nunca haces” por las listas de “cosas que estás viviendo”. Para ir a los sitios que dices que quieres ir y ni siquiera te has planteado realmente el pisarlos. En serio, ¿es ahí donde quieres estar?¿Es allí donde quieres ir?
Para reconocer tus límites y cuestionarte si puedes o no superarlos. Para hacer de cada uno de tus días un reto inalcanzable, una gran aventura y así volver a la cama empoderada con tus propios logros. Fuera de tu zona de confort vas a ser tu quien te saque las castañas del fuego y vas a ser también tú quien te haga más fuerte. Salir de tu zona de confort puede ser una montaña rusa de emociones.
Para ser feliz
Lo sé, también se es feliz en la zona de confort. Y es mucho más fácil quedarse debajo del ala que te da calor. Saboreando el amor de la lar. Pero tu felicidad se eleva al cuadrado cuando dejas de estar estática e inmóvil.
Créeme. Lo sé, no es una decisión fácil. Lo fácil es hacer lo de siempre con los de siempre comiendo lo de siempre y para siempre.
Pero necesitas salir de tu zona de confort o vas a perderte el resto del mundo. O el mundo va a perderte.