This post is also available in: InglésItalianoFrancés
New York, New York. Es un crisol de cultura, creatividad y sueños tan elevados como los edificios. Todavía me resulta un poco extraño decir que Nueva York es mi actual hogar. Ha sido un viaje bastante interesante hasta ahora y es bastante difícil de creer que sigo aquí después de tanto tiempo.
Explicar todo lo que me ha pasado me daría para una autobiografía completa y más. Pero en su lugar, os explicaré un poco los principales acontecimiento surgidos cada mes (han habido unos cuantos). Pero antes, me gustarías daros un consejo para aquellos que están pensando en mudarse a Nueva York.
Nueva York es duro. Es una ciudad en la que necesitas tener mucha fuerza y resistencia si quieres estar tiempo. Trasladarme por mi mismo fue algo muy valiente por mi parte, podría haber esperado a otros amigos antes de mudarme pero no quería esperar. Mudarme solo fue todo un reto y esto ha hecho que fuese capaz de ahora, estar contando mi historia.
Cuando te mudas por primera vez y necesitas tenerlo todo organizado, empezando por el alojamiento y el trabajo, una vez tienes eso, todo lo demás parece que va surgiendo solo. La actitud que adopté desde el primer día era una actitud de optimismo cauteloso. Estar tranquilamente seguro de que las cosas funcionan.
Como podrás ver, mi primer mes en Nueva York fue un poco loco. Aquí es donde todo empezó
Noviembre
Llegué a Nueva York la tarde del 3 de noviembre con mi hermana Carol, ella se quedó una semana conmigo de vacaciones antes de regresar a Boston para volar a casa. Mi primer alojamiento fue Chelsea Internation Hostel en West 20th Street, en Manhattan. Bastante bien ubicado. Los precios eran relativamente decentes y la ubitación era perfecta. Sumando, una estancia de dos semanas muy agradables.
La primera semana paso. Los primeros días implicaron hacer cosas turísticas como cenar en algunos restaurantes, tomar algunas bebidas para tratar de asimilar la situación, viviendo el resultado de elecciones presidenciales, apenas creíble.
Times Square la noche de las eleciones
La atmosfera del fin de semana fue simplemente increíble, la victoria de Conor McGregor UFC por el título en el Madison Squasre Garde. Asistí también a weigh-ins pero por desgracia el precio de la entrada era muy caro así que no pude vivir dicho evento.
Alvarez vs. McGregor, UFC 205 Weigh-Ins
Cuando mi hermana se fue de Nueva York el 9 de noviembre, las cosas se volvieron más reales. Aquí estaba yo, recién llegado a una de las ciudades más grandes del mundo buscando establecer una nueva vida. Era el momento de ponerse manos a la obra.
Mi universidad (University College Cork) celebró un evento de ex alumnos en Nueva York a mediados de noviembre, sabía que sería mi primera oportunidad de conocer a empresarios experimentados y jóvenes profesionales. Salí del evento sabiendo que éste sería sólo el primero de muchos eventos a los que tendría que asistir si quería encontrar un trabajo con éxito aquí.
Después de despedirme de la gente que conocí en el hostal (incluidos dos grandes psicólogos brasileños que estuvieron en la ciudad para una conferencia de psicología, y un australiano de Melbourne), tenía que hacer mi maleta e irme a vivir a un AirBnb, a cinco minutos del estadio de los Yankees en el Brox. No tengo ninguna queja del apartamento en el que me alojé – un apartamento muy bonito y todo funcionaba correctamente, además el dueño era genial. Alojarse allí durante dos semanas fue una experiencia impactante, y como era de esperar, no he vuelto al Bronx desde entonces.
Durante ese tiempo, mis días pasaban y yo seguía buscando trabajo, y apartamentos, daba paseos por la ciudad, asistía a eventos de networking por las noches. Incluso fui a mi primer partido de la NFL, viendo a los New England Patriots volver a vences a los Nwe York Jets en el MetLife Stadium en Nueva Jersey. ¿Quién hubiera podido predecir que vería a los futuros campeones de la Super Bowl?
New England Patriots @ New York Jets, 27 de noviembre
En resumen, los días pasaban muy rápido, volando más bien. Sin embargo, finalmente hice un gran avance con la investigación.
A través de Gypsy Housing NYC, un grupo de Facebook donde los números están en los miles y la competencia es feroz, hice un gran avance con el alojamiento. Sorprendentemente, el apartamento en Washington Heights (a 20 minutos del metro de Midtown) es el primer y único apartamento que he visto hasta el día de hoy. La verdad que he tenido mucha suerte tanto con el apartamento como con los dos estadounidenses con los que compartido piso. El metro está a tan sólo unos minutos, tenemos lavandería en el edificio (algo muy práctico) y tengo una habitación doble grande por el mismo precio que una habitación individual (precio de muchos otros lugares del mundo). Este fue el primer gran golpe de suerte que tuve a mi llegada, y esperaba que fuese el primero de mucho, por todas las cosas que quedaban por venir…